Veníamos desde Stavanger via subida a la roca del Púlpito. La chica de recepción muy simpática nos recibió cordialmente a nuestra llegada, muy tarde por cierto. Nos facilitó a su vez una habitación superior al no estar la nuestra limpia, aunque la verdad la otra tampoco lo estaba del todo, había basura de los anteriores huéspedes en la papelera. Dispone de microondas y nevera para calentaros algo si lleváis comida, aunque ojo! no hay ni platos ni cubiertos ni vasos, ni nada por el estilo. Lo peor es que hay mucha humedad en esta habitación, es incómodo, se nota en las sabanas y en la almohada y supongo que por eso está plagado de mosquitos y eso que estamos en Noruega a 18 de sept. Aun embadurnandome de repelente me picaron un par. Por lo demás bien, era un alto relativamente económico en el camino, aunque francamente es una zona muy bonita; nos percatamos de ello por la mañana al salir en dirección a Aurland. Saludos ALEX Y FANNY, Terrassa, Barcelona.